Como profesional formada en turismo, trabajé durante muchos años en diferentes áreas de la gastronomía. En los meses de verano buscaba el equilibrio en el “Schmiedhof” familiar, colaborando allí y disfrutando de la diversidad de la agricultura en el pueblecito venostano de Cengles, a los pies del Parque Nacional del Stelvio.
Justo en la salida del cono de deyección de Cengles, en parte en pendiente y en parte en llano, me he convertido ahora en agricultora ecológica a tiempo completo y cultivo diferentes variedades de manzanas, entre ellas Pinova, Sweetango, Royal Gala y Golden Delicious. También me interesa el cultivo del albaricoque del Val Venosta, que adora el clima seco de nuestras alturas y es único en sabor tanto como fruta fresca como producto transformado.
Aprendo mucho de la experiencia de mi padre, que lleva más de 60 años siendo agricultor y me apoya con gran dedicación. Vivo puerta con puerta con mi hermana Evi y su marido Markus, con nuestros hijos y nuestros padres. Como gran familia nos hemos comprometido juntos con la agricultura ecológica. Cuando nosotras, las hermanas, recibimos nuestra parte de la herencia, nos pareció la mejor decisión para relacionarnos con los ciclos de la naturaleza con más respeto.
La naturaleza está llena de experiencias fascinantes que me atrapan tanto a mí como a mi pequeño hijo Nelio. Por eso para mí es muy importante fomentar la biodiversidad en las superficies cultivadas y crear diferentes hábitats. Los montones de piedras ofrecen a los erizos y a distintos reptiles un refugio acogedor y un punto de partida para su caza de insectos. También las franjas de setos ofrecen espacio a distintas especies. En los tallos huecos de bambú del albaricoquero recogemos a las útiles tijeretas y luego las trasladamos a nuestros manzanares, para que allí den rienda suelta a su gran apetito por pulgones y huevos de carpocapsa. Observar la actividad incansable de los insectos en nuestros huertos de manzanos es para nosotros una gran alegría.
Gracias a la agricultura ecológica aprendemos así todos juntos, año tras año, a conocer nuevos ciclos de la naturaleza y a trabajar con ellos.
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